Empecemos con la definición de signo, que es aquella señal o imagen que podemos percibir con los sentidos (generalmente por la vista) y que posee un significado que tanto el emisor del signo como sus receptores han de conocer para comprenderlo. Lógico: si no sabemos qué quiere decir el signo, no lo entenderemos, no nos llegará el mensaje y, por tanto, no habrá comunicación.
Todos los signos tienen dos partes, a saber, el significante, que es lo que percibimos, lo que vemos sin más; y el significado, lo que quiere decir dicho signo. Recordad el ejemplo de esta señal de tráfico:
¿Cuál sería su significante? Lo que simplemente vemos, es decir, un triángulo rojo invertido sobre fondo blanco. ¿Y su significado? Que hay que ceder el paso a otros vehículos.
En función a la relación que exista entre el significante y el significado, podemos encontrarnos con tres tipos de signos:
* Iconos, cuando el significante y el significado se parecen mucho o son iguales. Por ejemplo:
¿Significante? Un sol. ¿Significado? Que va a hacer sol.
¿Significante? Un hombre nadando. ¿Significado? Que en ese lugar se puede nadar.
¿Significante? Un teléfono móvil tachado. ¿Significado? Que en ese lugar no se pueden usar móviles.
* Símbolos, cuando el significante y el significado no tienen ninguna semejanza o relación lógica directa; es decir, cuando lo que vemos no se parece en prácticamente nada a lo que entendemos al ver el símbolo. Por ejemplo:
¿Significante? Una paloma blanca con una rama en el pico. ¿Significado? La paz.
¿Significante? Un trébol. ¿Significado? La suerte.
¿Significante? Una E con dos rayas en medio. ¿Significado? La moneda euro.
Como podéis apreciar, un icono se entiende perfectamente nada más verlo. Un símbolo, por el contrario, no; hemos de saber con anterioridad lo que significa para que podamos comprenderlo o, si no, jamás averiguaremos lo que nos quiere decir.
* Indicios, cuando, al ver el significante, entendemos enseguida que antes de que dicho significante apareciera, ha tenido que ocurrir algo. Por ejemplo:
Cuando vemos este indicio (una tarta con un mordisco), entendemos de inmediato que alguien se ha comido antes un cacho. Cuando vemos a este niño manchado de pintura, comprendemos que antes ha estado jugando con ella.
Cuando vemos a este niño con la marca de carmín en su cara, sabemos enseguida que, antes, alguien con los labios pintados le ha dado un beso.
Espero que no haya ya dudas al respecto, pero, si todavía algo de todo esto no os ha quedado claro, por favor, hacedme las preguntas que queráis en los comentarios.
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