sábado, 23 de septiembre de 2017

4º ESO: Las modalidades textuales

Hemos abierto el presente curso con el siguiente vídeo:



Si habéis prestado atención, os habréis percatado de que se trata, esencialmente, de una narración. A fin de cuentas, nos cuenta una historia (la final de Champions entre el Real Madrid y la Juventus) con unos personajes (los jugadores de ambos equipos) que se hallan en un espacio (el estadio de fútbol) y un tiempo (una noche de junio). Hasta posee un narrador (el periodista Manolo Lama).

Sin embargo, no es la única modalidad textual que está presente en el vídeo. Y es que, además de una narración, también se nos han ofrecido un par de descripciones de Cristiano Ronaldo, al que se le ha definido como un 'bicho', un depredador... Es decir, se han enumerado distintas características del futbolista portugués. Del mismo modo, entre los periodistas se ha producido un diálogo, dado que estos charlaban entre sí, intercambiándose los roles de emisor y receptor.

¿Cómo es esto posible? Muy sencillo: las modalidades textuales (es decir, los tipos de texto) no suelen darse de forma aislada en el ámbito de la comunicación, sino mezcladas entre sí. De esta forma, es habitual encontrar textos que combinen la argumentación con la literatura; la narración con el diálogo; la exposición y la descripción, etc. A este fenómeno por el cual varios tipos de texto pueden mezclarse se lo denomina variedades textuales mixtas.

Por supuesto, esto no quiere decir que no pueda existir cada modalidad por sí sola. Recordemos este ejemplo de clase:



En este vídeo, a nada que hayáis prestado atención, no habréis escuchado ni un solo diálogo: el narrador nos habla sin que nosotros, los receptores, podamos responderle (como sucedería en una conversación normal y corriente). Del mismo modo, tampoco encontramos ninguna descripción: apenas hay un par de adjetivos que definen a Rafa Nadal, pero todos ellos están al servicio del tipo de texto que domina este ejemplo, a saber, la narración. No en vano, se nos ha contado una historia (la vida de Rafa Nadal) con unos personajes (Nadal, Federer, Djokovic...) en un lugar (Mallorca, París, Wimbledon...) y un tiempo (los distintos años de su carrera deportiva) determinados. Esto es lo que conocemos como una variedad textual pura, es decir, cuando se emplea una única modalidad de texto a la hora de comunicarse.

Eso sí, no existen muchos tipos puros. Por ejemplo, en el ámbito de la narración, solamente encontraríamos las biografías, esto es, las que cuentan la vida de un personaje relevante o famoso; en todos los demás casos, lo habitual es que la narración aparezca mezclada, como mínimo, con la descripción, la cual también es poco frecuente que aparezca de forma pura. De hecho, solo hallamos descripciones puras en textos científicos y técnicos, como este:

La aspirina es el nombre comercial del ácido acetilsalicílico. Es un fármaco de la familia de los salicilatos que tiene propiedades analgésica (alivia el dolor leve), antipirética (reduce la fiebre), antiinflamatoria (disminuye la inflamación) y anticoagulante plaquetario (en personas que tienen riesgo de formar trombos sanguíneos). Se utiliza también para tratar inflamaciones específicas tales como la enfermedad de Kawasaki, la pericarditis o la fiebre reumática. La administración de aspirina poco después de un ataque al corazón disminuye el riesgo de muerte y su uso a largo plazo ayuda a prevenir ataques cardíacos.

Por último, cabe destacar los diálogos puros, como los de este ejemplo:



Hemos reconocido lo que es, ¿verdad? Se trata de una obra de teatro, que no posee narrador nunca y, además, está formada de forma casi exclusiva por diálogos, que son los que desarrollan, a fin de cuentas, la acción. De todos modos, lo habitual, al igual que sucedía con las otras dos modalidades textuales, es que el diálogo forme parte de una obra narrativa (o de otro estilo), y no aparezca de manera pura.

Eso sí, ya sea una modalidad pura o mixta, todas han de cumplir con tres condiciones o requisitos inapelables, llamados propiedades del texto. Estas son:

La cohesión, que es la propiedad del texto que permite que todos los enunciados que lo conforman estén "unidos", esto es, relacionados o conectados entre sí. Para ello, nos podemos valer de varios recursos y técnicas, si bien este año solo vamos a estudiar uno de ellos, a saber, los conectores discursivos, cuya clasificación os dejo a continuación:

CLASES
PROPIEDADES
EJEMPLOS





De tiempo

Ordenan en una secuencia temporal los sucesos.

después (de; que), luego, desde (que; entonces), a partir de, antes de, antes que, hasta que, en cuanto, al principio, en el comienzo, a continuación, inmediatamente, temporalmente, actualmente, finalmente, por último, cuando.




De adición
o aditivos
Suman enunciados.

y, además, también, asimismo, también, por añadidura, igualmente, encima, es más, más aún, incluso, hasta, para colmo.






De oposición o contrargumentativos

Contrastan u oponen ideas.

pero, sin embargo, no obstante, , en cierto modo, en cierta medida hasta cierto punto, si bien, por otra parte, por el contrario, en cambio, con todo, a pesar de todo, aun así, ahora bien, de cualquier modo, al mismo tiempo.





De causa y consecuencia

Indican la causa y/o la consecuencia de algo.

por tanto, por consiguiente, de ahí que, en consecuencia, así pues,  por consiguiente, por lo tanto, por eso, por lo que sigue, por esta razón, entonces, entonces resulta que, de manera que, porque, pues, puesto que.



De explicación
o explicativos

Aclaran lo que se ha dicho anteriormente.

es decir, o sea, esto es, a saber, en otras palabras, por ejemplo.






Organizadores

ordenadores

Ordenan las partes de un texto.
ante todo, para comenzar, primeramente, en fin, por último, en suma, finalmente, por último, terminando, para resumir, por otro lado, por otra parte, en otro orden de cosas, a continuación, acto seguido, después.


Podéis hallar más ejemplos en la página 37 de vuestro libro de texto.

* La coherencia, que es la propiedad que permite que un texto se perciba como una unidad de sentido. Para ello, y en primer lugar, todo el texto ha de girar en torno a un mismo tema central. En otras palabras, un texto nunca podría ser así:


Cristiano Ronaldo es uno de los mejores futbolistas del planeta gracias a la fotosíntesis, que es un proceso de color rosa, que simboliza el poder del faraón de Egipto, que vive en la Gran Vía de Madrid, formada por plantas tropicales de la raqueta de Carolina Marín, quien ganó la semana pasada el Nobel de medicina, que se concede al mejor cazador de palomas de Cáceres.

Pero sí de esta otra manera:



Por extraña que nos pueda parecer esta historia, esta sí presenta un tema central: unos científicos que desean fabricar unas zapatillas que permiten bailar, pero que solo Vladimir Putin, presidente de Rusia, puede utilizar. A su vez, este relato está estructurado en planteamiento (los científicos idean y construyen las zapatillas), nudo (los científicos prueban, sin éxito, las zapatillas) y desenlace (Putin las prueba con éxito, pero destruye el planeta). Poseer una estructura es otra de las condiciones para que un texto sea coherente.

* La adecuación, que es la propiedad por la cual el texto se ajusta a la situación o contexto y a los receptores. Pongamos un ejemplo para entenderlo mejor:


¿Habéis entendido algo de lo que han comentado en este vídeo? Lo más seguro es que no. ¿Y por qué? Muy sencillo: porque no ha sido preparado para alumnos de la ESO. Su vocabulario, los conceptos que maneja, la complejidad de las oraciones... Todo es de un nivel mucho más avanzado y especializado que el que tenéis actualmente. Este vídeo, por tanto, no estaba adaptado a vuestras capacidades, conocimientos y experiencias. Por el contrario:



¿A que os habéis enterado de casi todo? ¿Y a qué se ha debido este cambio? A que el vocabulario era más sencillo; las oraciones, más cortas; había ejemplos, dibujos... Este vídeo, a diferencia del anterior, sí está adaptado a personas de vuestra edad.

En esto consiste la adecuación. Si lo que hemos escrito es demasiado complicado (o fácil) para el receptor, no lo consideraremos como un texto propiamente dicho. En conclusión, un texto es adecuado cuando se hace para que el receptor lo entienda sin problemas y capte su interés.


Si tenéis alguna duda, por favor, emplead los comentarios para resolverlas.

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